Sobre la negligencia existencial y demonios afines
Todos conocemos -o al menos hemos escuchado- sobre Sigmund Freud y Albert Einstein. De Einstein ya se ha dicho todo. Llamarle a alguien “un Einstein” es concederle un altísimo grado de inteligencia, de brillantez, de cientificidad. Tal pareciera como si dicho personaje representa, a un nivel de imaginario social, el arquetipo de la sabiduría. De …